La taza en la derecha da paso al swing largo y extendido del brazo, con los dedos casi en forma de cruz, listos para enganchar en la oreja de la taza llena, humeante y negra en su interior, del placer adictivo de un buen café.
Es la procesión interna, mental y espiritual.
Un ritual placentero y privado.
En conjunto y en solitario.
En un cuarto lleno o no.
Paralizado o en movimiento.
El momento es único en el primer sorbo.
El placer es extendido a lo largo de un río caudal
En ademán de consumación.
Culminado por la gravedad
Llegar al destino final
No es el estómago.
Es el cerebro quien se beneficia.
Es la mente impregnada de cafeína
Que despierta,
Que fomenta.
Que inspira,
Que respira y suspira.
Un amanecer al atardecer
Que maravilla del café.
Subir cuando todos bajan.
Un elevador mental con penthouse en lo espiritual.
Esa es la verdad.
Esta es la realidad.
El arte de tomar café con la izquierda.
Es un ritual placentero y privado.
Para los que entienden
Me siento alargado.
Para los desconectados,
No me juzguen por favor.
Es una misión.
Es una canción.
Un poema
La atención.
A la tensión, jamás.
La vida misma al saltar
A la única y fugaz
Maravilla de tomar café,
Con la izquierda…
©️2019 Mr. Deluna.